-Yo creo que este libro merece un buen final- dijo Apolo -¿Quién vota porque lea Percy?

Los chicos y varios de los dioses alzaron la mano

-¿Qué?- preguntó Percy -por supuesto que no

-Percy, es el final del libro- señaló Poseidón

-Nop- dijo Percy negando repetidamente con la cabeza -fue suficientemente malo que leyeran mis pensamientos

-Ya es el último capítulo, sesos de alga ¿Qué más podría salir mal?- masculló Thalia

Percy se encogió de hombros -Hay tantas respuestas para eso

-¿Lo harías por unas galletas azules?- preguntó Leo

Percy lo meditó -Nop

-¿Por otro show liderado por Jason?- preguntó Piper riendo

-¡Pipes!- gritó Jason sonrojado

-Es tentador- bromeó Percy - pero no

-Annabeth también quiere que leas- señaló Afrodita

Percy se volteó hacia Annabeth que tenía una pequeña sonrisa

-Ya vamos a terminar el libro, sesos de alga- dijo Annabeth -es el último capítulo

-¡Listilla!- se quejó Percy

Annabeth lo besó

-Está bien- dijo Percy - pero, sí esos otros libros vienen desde mi punto de vista, no volveré a leer

-De acuerdo- dijo Annabeth

Percy suspiró y tomó el libro -Capítulo 23, nos despedimos... Más o menos

El campamento se prolongó aquel verano. Todavía duró dos semanas más, justo hasta el comienzo del curso, y debo reconocer que fueron las dos mejores semanas de mi vida.

-Obviamente- dijo Afrodita con una sonrisita

-Fue genial- dijo Percy

-Estuvo increíble- asintió Grover

-Por lo menos tuvimos un poco de paz- asintió Annabeth

-Un poco- dijo Percy con una mueca

Desde luego, Annabeth me mataría si dijera algo diferente, pero hubo también muchas otras cosas estupendas.

Annabeth alzó una ceja

-Lo matas cuando termine el capítulo- dijo Thalia

-Sí- asintió Leo - es divertido verlo leer

-Oye Charmander, creí que estabas de mi lado- dijo Percy

-Depende de la situación, Ariel- dijo Leo

Grover se había hecho cargo de los sátiros buscadores y estaba enviándolos por todo el país para encontrar mestizos que aún no hubieran sido reconocidos. Por el momento, los dioses cumplían su promesa.

-Claro que sí- dijo Apolo - nosotros siempre cumplimos nuestra palabra

-Sí, por eso están hablando con nosotros- señaló Thalia

-Ella tiene un punto- dijo Artemisa

Apolo bufó -Nos haces quedar tan mal, hermanita

-No es la única- masculló Hera dándole una mala mirada a Zeus y Poseidón

Los dioses fingieron no darse cuenta

Estaban apareciendo semidioses nuevos por todas partes: no sólo en Estados Unidos, sino en muchos otros países.

-Oh, siempre quise tener un hermano de Brasil- dijo Leo

-¿Qué? ¿Por qué?- preguntó Piper

-Oye, me encanta su acento- dijo Leo encogiéndose de hombros

-A mí igual- dijo Apolo suspirando

-A mí me gusta más el italiano- dijo Will -aunque gracias a los dioses Nico no es mi hermano- balbuceó

Nico se sonrojó

-Awwwww- chilló Afrodita

-Casi no damos abasto -reconoció Grover una tarde, mientras nos tomábamos un descanso en el lago de las canoas-. Necesitaremos un presupuesto más grande para viajes; podría emplear tranquilamente a un centenar más de sátiros.

-Lo único malo es que no hay mucho presupuesto- murmuró Quirón

-Ese sería el pequeño detalle a resolver- asintió Grover

-Casi nada- dijo Percy encogiéndose de hombros

-Les dije que era mejor fabricar vino- masculló Dionisio

-No creo que esa sea una buena idea- señaló Hestia

Dionisio bufó

-Sí, pero los que tienes están trabajando a lo bestia -le dije-. Me parece que les das miedo.

Grover se sonrojó.

-Qué tontería. Yo no doy miedo.

-Nooooo, para nada- dijo Travis

-No doy miedo- dijo Grover sonrojado

-Pregúntale a mis sueños cada que recuerdo el grito de pánico- dijo Connor

-Eso fue diferente- dijo Grover

-Eso quiere decir que sí das miedo- dijo Connor

-Genial- murmuró Grover

-Eres el señor de la naturaleza, amigo. El elegido de Pan. Y miembro del Consejo de...

-Claro que eso también tiene que ver- asintió Travis

-Imagina a quienes no quieran obedecer- dijo Connor

-Chicos por favor- dijo Grover con un suspiro

-¡Basta! -protestó-. Eres tan terrible como Enebro. Pronto pretenderá que me presente como candidato a presidente.

-Secundo la moción- dijo Leo

-Apruebo la moción- dijo Percy

-¡Grover para presidente!- gritaron los Stoll

-Podemos poner algo así como "los animales son amigos, no comida"- dijo Piper

-Sobre todo los animales sagrados- masculló Apolo -estúpido cuidador

-No me gusta el slogan- señaló Leo

-A mí sí- dijo Grover

-Creo que han encontrado a su alma gemela- bromeó Thalia mirando a Piper y Grover

-¡Por los dioses, Thalia! Creí que estábamos del mismo lado- dijo Piper

-No puedo perder la oportunidad de molestar a alguien- dijo Thalia

Empezó a mascar una lata mientras contemplábamos la serie de cabañas nuevas que estaban construyendo al otro lado del lago. La U que formaban las antiguas pronto se convertiría en un rectángulo completo, y los semidioses se habían aplicado a la tarea con entusiasmo.

-No es un rectángulo- dijo Annabeth encogiéndose de hombros

-Los rectángulos me gustan- dijo Percy

-¿Por qué?- preguntó Jason

-No lo sé- dijo Percy - pero son geniales

-De acuerdo- dijo Jason -supongo que si las personas tienen un color favorito, también pueden tener una figura favorita

Percy asintió "seriamente"

Nico tenía a unos cuantos obreros muertos trabajando en la cabaña de Hades. Aunque él sería por ahora su único ocupante, la verdad es que le estaba quedando muy chula:

-¿Quién diría que sombritas tendría buen gusto?- dijo Thalia

-Pero por supuesto que tiene buen gusto- dijo Apolo guiñándole un ojo a Will

Will y Nico se sonrojaron

-No me refería a ese buen gusto- dijo Thalia riendo

-Cállate- gruñó Nico

-Yo dudaría lo del buen gusto- masculló Hades

-Cariño- suspiró Perséfone

-Yo creo que su gusto es exquisito- dijo Afrodita

-¡Por los dioses! Estamos hablando de la cabaña- masculló Nico sumamente sonrojado

Paredes macizas de obsidiana, con una calavera sobre el dintel y antorchas que ardían con fuego griego las veinticuatro horas del día.

-De acuerdo, eso suena muy bien- dijo Hades

-Tal vez faltarían algunas plantas- señaló Perséfone

-No soy muy bueno con las plantas- dijo Nico

-Y menos con los dientes de león- dijo Thalia ganándose una mala mirada del hijo de Hades

Perséfone los miró confundida

A su lado, se alzaban las cabañas de Iris, Némesis, Hécate y algunas más que no identifiqué. Todos los días añadían alguna nueva al proyecto.

-Todos los días había más trabajo- dijo Tyson con una sonrisa

-Fue un verano bastante ajetreado- asintió Grover

-Pero estuvo muy genial- dijo Percy

La cosa iba tan bien que Annabeth y Quirón estaban considerando la posibilidad de crear una nueva ala de cabañas para que todas contaran con suficiente espacio.

-No funcionó exactamente- dijo Annabeth encogiéndose de hombros

-Aun así el área de cabañas quedó muy bien, niña- dijo Quirón

Annabeth sonrió

La cabaña de Hermes ya no estaba tan abarrotada como antes, porque muchos de los chicos no reconocidos habían recibido la señal de sus progenitores divinos.

-Taaan- señaló Travis

-Lo bueno fue que tuvimos carne fresca... Digo hermanos nuevos para enseñar- dijo Connor

-Por supuesto, a nosotros siempre nos encanta enseñar cosas nuevas- dijo Travis

-Es cierto- dijo Chris -crees que conoces todas las técnicas de robo hasta que conoces a estos chicos

-Estamos a tu servicio- dijeron los Stoll al unísono

-Tenías que fijarte en un mocoso de Hermes- masculló Ares mirando a su hija

Clarisse rodó los ojos

Sucedía casi cada noche. Y cada noche, asimismo, llegaban semidioses a nuestras fronteras, acompañados de sátiros buscadores y perseguidos por varios monstruos repulsivos. La mayoría conseguía zafarse de ellos y entrar en el campamento.

-La mayoría- suspiró Percy

-Sí- murmuró Grover con una mueca

-Siento que cada monstruo que los perseguía era peor que el anterior- dijo Connor

-Y que lo digas hermano, eran horribles- comentó Travis

-Al menos teníamos las fronteras mágicas- señaló Miranda

-Eso es un alivio- estuvo de acuerdo Katie

-El próximo verano va a ser muy distinto -le dije a Grover-. Quirón prevé que tendremos el doble de campistas.

-Eso no te lo puedo negar, el verano fue muy distinto- dijo Grover

-Siempre es genial tener más diversión- dijo Percy con sarcasmo

Los semidioses resoplaron

-Sí -asintió-, pero seguirá siendo el mismo sitio entrañable de siempre.

Suspiró con satisfacción.

-Eso también es cierto- asintió Percy

-No puedo negarlo- dijo Annabeth con una pequeña sonrisa

-Siempre será un sitio entrañable- dijo Percy

-Eso espero, muchacho- dijo Quirón con una pequeña sonrisa

Observé un rato a Tyson, que dirigía a un grupo de cíclopes constructores. Estaban izando piedras enormes para levantar los muros de la cabaña de Hécate, una tarea difícil y delicada.

-No fue divertido- dijo Tyson con una mueca -esas rocas daban mucho miedo

-Supongo que las rocas estaban encantadas- dijo Poseidón

-Sip, y fueron la causa de mucho estrés sobre los campistas- bromeó Percy

-Esas rocas podían volarnos- dijo Connor - tenemos justificación para mantenernos alejados

Cada piedra tenía signos mágicos grabados en la superficie y, si se caía alguna, podía explotar o convertir en árbol a todo el mundo en un radio de medio kilómetro.

-Además no me gustaría ser un árbol- dijo Travis

Apolo le dio una mala mirada -Los árboles son muy interesantes

-Y todos sabemos que sí te gustaría ser un árbol- dijo Clarisse - tal vez así cierta hija Deméter te pondría más atención

Travis se puso de 20 tonos de rojo diferentes, Deméter le dio una mala mirada al chico, Katie desvió la mirada y se sentía la incomodidad aunque todos trataban de mantener expresiones serias

Clarisse le dio una especie de sonrisa burlona -Les dije que me las pagarían

-Esa es mi chica- dijo Chris

-Dioses...- murmuró Connor

Cosa que a nadie, salvo a Grover, le habría hecho gracia, supongo.

-No, no solo a Grover- bromeó Chris

-Vaya, gracias hermano- masculló Travis

-Entre mis tareas de protección de la naturaleza y la búsqueda de mestizos, voy a tener que viajar mucho -me advirtió-. Quizá no nos veamos tanto.

-Eso no cambiará nada. Sigues siendo mi mejor amigo.

-¿Disculpa? Creí que yo era tu mejor amigo- dijo Leo -Ariel, me siento traicionado

-Problemas en el paraíso- bromeó Piper

Percy le sacó la lengua -Voy a seguir leyendo antes de que mi integridad física corra peligro- bromeó

Sonrió de oreja a oreja.

-Aparte de Annabeth -comentó.

-Eso es diferente.

-Ya -asintió-. Desde luego que sí.

-Obviamente que es diferente- dijo Afrodita

-Muy diferente- estuvo de acuerdo Grover

Percy se sonrojó

A media tarde, mientras daba un último paseo por la playa, oí una voz conocida:

-Un buen día para pescar.

-¿Quién será?- preguntó Apolo con sarcasmo

-El único que siempre dice que es un buen día para pescar- señaló Hermes

-Siempre es un buen día para pescar- dijo Poseidón

-Eso depende de si te lo preguntamos a ti o a los mortales- señaló Apolo

Mi padre, Poseidón, estaba metido en el agua hasta las rodillas, con sus bermudas de siempre, su vieja gorra y una camisa muy fina verde y rosa Tommy Bahama.

Tenía una caña de pescar en las manos y, cuando arrojaba el sedal, lo mandaba muy lejos: como a medio camino de Long Island Sound.

-Por eso para él siempre es un buen día- dijo Hermes

-Si tu padre es bueno con la pesca ¿Tú también lo eres?- preguntó Leo

-Percy se encogió de hombros

-Porque de ser así, podríamos realizar nuestro nuevo negocio- señaló Leo

-Que buena idea- dijo Connor

-No gracias- dijo Percy

-Eh, papá -dije-. ¿Qué te trae por aquí?

Hizo una mueca.

-No tuvimos ocasión de hablar a solas en el Olimpo. Quería darte las gracias.

Zeus bufó

-Bueno, más vale tarde que nunca- dijo Hestia con una sonrisa

-No era necesario- dijo Percy sonrojado

-¿A mí? Fuiste tú quien acudió a salvarnos.

-Sí, y mi palacio entretanto fue destruido. Pero ¿sabes?, los palacios pueden reconstruirse.

-Y tenemos una arquitecta que podría hacerlo de lo mejor- dijo Thalia

Annabeth se sonrojó

-Lo tomaré en cuenta- dijo Poseidón sonriendo

He recibido muchísimas tarjetas de agradecimiento de los demás dioses. Incluso Ares me ha enviado una, aunque creo que Hera lo obligó a hacerlo.

-Es lo más probable- masculló Ares - no ando dando por ahí tarjetas de agradecimiento

-Aun así la mandaste- dijo Poseidón

-Ni el terrible dios de la guerra desobedece su madre- señaló Hefesto

Ares le dio una mirada asesina

Resulta más bien gratificante. Así que... gracias. Supongo que incluso los dioses pueden aprender nuevos trucos.

-No somos mascotas- dijo Apolo

-No lo dije de esa manera- bufó Poseidón

El agua empezó a burbujear. En el extremo del sedal, de repente salió a la superficie una enorme serpiente marina.

-Y los reptiles marinos me agradan aún menos- dijo Apolo

-Era bastante impresionante- dijo Percy

-Las serpientes marinas suelen ser impresionantes- asintió Poseidón

Forcejeaba y daba tremendos latigazos, pero Poseidón se limitó a suspirar.

-Porque cuando eres el dios del mar puedes darte ciertos lujos- dijo Leo -como ver una serpiente marina sin preocuparte por tu vida

Poseidón le dio una pequeña sonrisa

Sujetando la caña con una mano, sacó su cuchillo y cortó el sedal. El monstruo volvió a sumergirse en el agua.

-Genial- dijo Connor -ahora irá a contarles la experiencia a sus amigas

-Por supuesto, algo así no se puede ocultar- dijo Leo

-No puede tener la experiencia para sí misma- dijo Percy encogiéndose de hombros

-No tenía el tamaño suficiente -se lamentó-. Tengo que soltar a los pequeños o los guardas se me echarán encima.

-¿Los pequeños?

-Imagina si fuera una grande- dijo Miranda

-No, muchas gracias, así estoy bien- dijo Percy

Él sonrió.

-Estáis haciendo un buen trabajo con esas nuevas cabañas, por cierto. Supongo que eso significa que ya puedo reconocer a todos mis demás hijos y mandarte unos cuantos hermanos el verano que viene.

Los dioses lo voltearon a verlo con incredulidad

-Espero que bromees- bufó Zeus

-Eres el menos indicado para hablar- masculló Poseidón

-Y así es como la cabaña de Poseidón se llenó- bromeó Apolo

-Y así es como Percy se arrepintió de no aceptar la inmortalidad- dijo Leo

-Claro que no- dijo Percy riendo

-Ja-ja-ja.

Poseidón recogió su sedal y yo lo miré.

-Bromeas, ¿no? -pregunté con cierta inquietud.

-Y Percy ya estaba todo preocupado- dijo Piper

-Y oírselo decir a Percy es genial- dijo Apolo

-Hora de entrar en pánico- dijo Thalia

-¡Oye!- se quejó Jason

Thalia le dio una sonrisa

Me hizo un guiño enigmático y no supe si hablaba en serio.

-Si es cierto ¿Puedo obtener un aviso al menos?- preguntó Percy

-Claro- dijo Poseidón riendo

-Nos veremos pronto, Percy -dijo-. Y recuérdalo, hay que distinguir si los peces tienen tamaño suficiente para pescarlos.

-Ese tenía el suficiente tamaño para mí- dijo Percy riendo

-Para mí también- dijo Apolo

-Opino lo mismo- asintió Leo

-Creo que tengo que enseñarlos a pescar- dijo Poseidón

-No creo que estuvieras hablando precisamente de peces- bufó Atenea

Dicho lo cual, se disolvió en la brisa marina, dejando una caña de pescar tirada en la arena.

-Alguien tiene que aprender a recoger sus cosas- dijo Apolo

-No puedes ir dejando cosas tiradas por todos lados- dijo Hades con burla

-Miren quien habla- bufó Poseidón

Aquella noche, la última en el campamento, se celebró la ceremonia de las cuentas de collar.

Percy suspiró con nostalgia

-Esa cuenta es muy linda- dijo Katie con un pequeño suspiro de nostalgia

Los chicos asintieron

La cabaña de Hefesto había diseñado la de aquel año: una cuenta que mostraba la imagen del Empire State rodeada de una espiral de letras griegas diminutas, con todos los nombres de los héroes que habían sucumbido en defensa del Olimpo.

-Una manera muy noble de honrarlos- dijo Hestia con una sonrisa

-Lo merecían- asintió Percy

-Y los honra aún más con la construcción de las demás cabañas- dijo Hazel con una pequeña sonrisa

-Fue algo bueno- dijo Percy

Había demasiados nombres, pero aun así me sentí orgulloso de recibirla y la coloqué en mi collar; ya tenía cuatro cuentas.

-Tienes todo el derecho a sentirte orgulloso, en primera, por estar vivo- dijo Poseidón

-Por ser un héroe- dijo Apolo

-Por cambiar algunas cosas para los semidioses- dijo Thalia

Percy se sonrojó

Me sentía como un veterano.

-Ya eras un veterano- dijo Annabeth con una sonrisa

-Tienes razón, ya me estaba haciendo viejo- bromeó Percy

-Bastante- asintió Annabeth

Pensé en la primera hoguera de campamento a la que había asistido, a los doce años, y recordé que me había sentido como en casa de inmediato. Eso al menos no había cambiado.

-Lo cual es bastante genial- dijo Percy -y no creo que eso cambie nunca

-Nunca digas nunca- dijo Hermes

-Acabas de decirlo, dos veces- señaló Apolo

-Sabes a lo que me refiero- dijo Hermes rodando los ojos

-¡Jamás olvidéis este verano! -nos dijo Quirón. Estaba extraordinariamente recuperado, aunque todavía se le veía una leve cojera mientras trotaba junto al fuego-. Este verano hemos descubierto la bravura, la amistad y el coraje. Hemos mantenido el honor del campamento.

-El honor es una parte muy importante- masculló Ares

-Sí claro miren quién habla, el que se besuquea justo en medio de un captura de bandera- bufó Atenea

-Eso simplemente pasó cuando estos mocosos llegaron- dijo Ares -fue su culpa

-Claro- dijo Poseidón -y ya que lo traes a colación, recuerden que nosotros ganamos

Atenea bufó

Me dirigió una sonrisa y todos aplaudieron. Desvié la mirada y reparé en una niña con vestido marrón que cuidaba el fuego. Tenía un brillo escarlata en los ojos, y me hizo un guiño. Nadie más parecía advertir su presencia, pero llegué a la conclusión de que ella quizá lo prefería así.

-En algunos momentos es mejor pasar desapercibida- dijo Hestia -ustedes estaban teniendo su momento en familia

-Una familia rara y disfuncional- dijo Leo

-Pero familia al final de cuentas- dijo Jason

-Awww tan lindos- chilló Afrodita

-Y ahora -dijo Quirón-, ¡a la cama temprano! Recordadlo, tenéis que desalojar las cabañas mañana a mediodía, a menos que hayáis hecho las gestiones necesarias para pasar todo el año con nosotros.

-Por favor, que no se queden demasiados- masculló Dionisio -no sé porque tenemos que avisarles

-Porque de no hacerlo te meterlas en muchos problemas, cariño- dijo Afrodita

-Serían menos de los que dan estos mocosos- bufó Dionisio

Las arpías de la limpieza devorarán sin piedad a los rezagados, ¡y no me gustaría concluir el verano con una nota amarga!

-No después de todo lo que pasó- dijo Poseidón

-Sería el colmo- dijo Thalia

-Siempre puede pasar lo peor, cara de pino- dijo Percy

-¿Pasó algo?- preguntó Poseidón

-No en ese momento- dijo Percy encogiéndose de hombros

A la mañana siguiente, Annabeth y yo nos detuvimos en lo alto de la colina Mestiza y contemplamos los autobuses y furgonetas que empezaban a salir, llevándose de vuelta al mundo real a la mayoría de los campistas.

-Nada mejor que un paseo romántico por la mañana- asintió Afrodita -es la mejor hora

-Y dado que la mayoría de los campistas ya se iban...- dijo Apolo

-Ya cállate, Apolo- dijo Artemisa

-Que grosera eres- bufó Apolo

Algunos veteranos, así como algunos recién llegados, se quedaban en el campamento, pero yo volvía para iniciar mi segundo año en la Escuela Secundaria Goode: la primera vez en mi vida que hacía dos cursos en el mismo colegio.

-Vaya eso es un gran logro- dijo Leo -yo opino que hagamos una fiesta para celebrar

-Yo estoy de acuerdo con el mocoso- dijo Dionisio -cualquier ocasión es buena para celebrar

-Tú solo quieres tú preciado vino- bufó Artemisa

-No puedo negarlo- dijo Dionisio

-Adiós -nos dijo Rachel, echándose la bolsa al hombro. Se la veía bastante nerviosa, pero pensaba mantener la promesa que le había hecho a su padre y asistir a la Academia Clarion en New Hampshire. Hasta el verano siguiente no recuperaríamos a nuestra Oráculo.

-Me hubiera gustado más estar como oráculo- murmuró Rachel -la academia para señoritas no es lo mío

-Pero al menos sabrás que podrás estar con tus amigos después del curso escolar- dijo Apolo - te hará más llevadero el tiempo

-Al menos- Rachel asintió

-Te irá de maravilla. -Annabeth la abrazó. Era curioso: ahora parecía llevarse muy bien con ella.

-Muy curioso- dijo Piper con una sonrisita burlona

-Quien sabe por qué habrá cambiado- dijo Thalia

-Nos llevábamos bien, solo que estaba demasiado celosa para notarlo- dijo Rachel

Annabeth se sonrojó -¡Por los dioses!
No estaba celosa

-Para nada- dijo Piper

Rachel se mordió el labio.

-Ojalá tengas razón. Estoy algo preocupada. ¿Y si alguien se pregunta qué van a poner en el examen de Mates y yo empiezo a farfullar una profecía en medio de la clase de Geometría? « El teorema de Pitágoras será el segundo problema...». ¡Dioses, resultaría muy embarazoso!

-No querida, eso no funciona así- dijo Apolo -podrías tener algunas visiones, pero no te vas a poner a recitar una profecía

-Eso es un alivio- dijo Rachel -porque ya hasta estaba inventando una excusa por si pasaba

-Chica lista, pero no tienes de que preocuparte- dijo Apolo

Annabeth se echó a reír y, para mi alivio, consiguió que Rachel sonriera un poco.

-Awww así es como se conforma una gran amistad- dijo Connor -nada mejor que los celos para ser amigos

-Deberías mantenerte callado, así como Travis que ha estado muy tranquilo- dijo Chris

Travis le dio una mala mirada

-Bueno -dijo-, portaos bien el uno con el otro. -Vete a saber por qué, pero me miró como si fuera un tipo problemático.

-Un completo misterio- bufó Nico

-Nunca podría adivinar por qué te miró de esa manera- dijo Thalia

-Menos yo- dijo Percy -es algo que jamás vamos a saber

Antes de que pudiera protestar, Rachel nos deseó suerte y corrió cuesta abajo para subir a su vehículo.

-Claro que ibas a empezar a protestar- dijo Annabeth

-Solo un poco- asintió Percy -pero se fue demasiado rápido

-Porque sabía que ibas a protestar- dijo Rachel

Annabeth, gracias al cielo, se quedaría en Nueva York. Sus padres la habían dejado ingresar en un internado de la ciudad para que permaneciera cerca del Olimpo y pudiera supervisar los trabajos de reconstrucción.

-Ajá ahora se le llama supervisar los trabajos- dijo Piper

-Iba a supervisar los trabajos- protestó Annabeth

-Sobre todo el trabajo llamado Percy- señaló Thalia

-Y para estar cerca de mí, ¿no? -pregunté.

-Hum, me parece que hay alguien aquí que se da demasiada importancia. -Pero entrelazó sus dedos con los míos.

-Awww, ustedes son tan lindos- chilló Afrodita - me encantan

-Hacen una pareja adorable- suspiró Perséfone

-Nunca las debieron haber juntado- bufó Hera viendo con irritación a Afrodita y Perséfone

Me acordé de su idea de construir algo permanente, de la que me había hablado en Nueva York, y pensé que quizá estábamos empezando con buen pie.

Percy se sonrojó

-Me gustó que tú lo leyeras- dijo Annabeth con una sonrisa

-Solo leo por ti- dijo Percy riendo

-Eres un sesos de alga- dijo Annabeth y se recargó contra él

Peleo, el dragón guardián, se enroscó alrededor del tronco del pino, justo debajo del Vellocino de Oro, y empezó a roncar, echando una bocanada de humo a cada suspiro.

-Él también estaba en modo relajado- dijo Miranda

-Ya era hora en realidad- dijo Katie

-¿Has estado pensando en la profecía de Rachel? -le pregunté a Annabeth.

-Qué manera de arruinar un momento tan lindo- dijo Afrodita -ustedes son expertos en eso

Percy frunció el ceño -No estoy seguro si debería ofenderme

Arrugó el ceño.

-¿Cómo lo sabes? -contestó.

-Porque te conozco.

-Y porque también lo estabas haciendo- señaló Annabeth

-Tal vez un poco- asintió Percy

-Claro que sí, porque a pesar de todo no creíste que tardaría generaciones en pasar- dijo Apolo -lo cual me ofende muchísimo, pero tenías razón

Me dio un empujón con el hombro.

-Vale, sí, he pensado. « Siete mestizos responderán a la llamada». Me pregunto quiénes serán.

-Nos presentamos, mucho gusto, somos los de la profecía- dijo Leo

-Es todo un gusto- dijo Percy

Vamos a tener muchas caras nuevas el verano que viene. -Sí -asentí-. Y todo eso del mundo cayendo bajo la tormenta o el fuego... Frunció los labios.

-Esa parte fue agradable ¿No es cierto?- preguntó Leo

-Leo, golpéate contra la pared- dijo Piper con encanto

-Debo golpearme contra la pared-dijo Leo aproximándose a la pared más cercana

-¡Leo!- chilló Calipso un poco más estridente de lo normal y le dio una mala mirada a Piper, Leo salió de su trance antes de golpearse

-Eso fue bajo, reina de belleza- dijo Leo

Piper se encogió de hombros

-Y los enemigos a las Puertas de la Muerte. No lo sé, Percy, pero no me gusta. Creía... bueno, que quizá tendríamos un poco de paz para variar.

-Que estúpida- bufó Annabeth

-Ya ves que nunca pasa lo que queremos- suspiró Percy

-Para nada- suspiró Annabeth

-No sería el Campamento Mestizo si fuese pacífico -dije.

-Ya... O tal vez la profecía no se cumpla en muchos años.

-Eso no tú te lo creíste- señaló Thalia

-Quería creerlo- dijo Annabeth

-Chicos, dejen de mirarme de esa manera- dijo Apolo

-Lo sentimos- murmuraron los semidioses

-Podría tratarse de un problema para la próxima generación de semidioses. En tal caso podemos relajarnos y disfrutar.

-Claro, hay que dejarle los problemas a la próxima generación- dijo Leo - eso haría más fáciles las cosas

-¿Por qué deberíamos dejarles los problemas a las próximas generaciones?- preguntó Jason

-Porque sí- dijo Leo - hay que dejarles un poco de acción

Ella asintió, aunque aún parecía inquieta. No la culpaba, pero me resultaba difícil preocuparme en un día tan bonito, con ella a mi lado y sabiendo que no me estaba despidiendo en realidad. Teníamos mucho tiempo por delante.

Annabeth apretó los labios, Percy le sonrió inocentemente

-Ustedes son tan lindos- dijo Perséfone

-Sí estabas preocupado, sesos de alga- dijo Annabeth

-Bueno, sí estaba un poco preocupado, pero no en ese momento- dijo Percy

-¿Una carrera hasta abajo? -la reté.

-Pues pierdes seguro. -Salió disparada por la ladera y corrí tras ella.

Por una vez, no miré atrás.

-Fin del capítulo- anunció Percy alzando las manos -¡Por fin! Ya era hora, no podía esperar más y también por fin acabó el libro, ya era justo

-No te emociones tanto, ahí hay otros cinco- señaló Thalia

-No empezaremos hoy- dijo Percy -dejen disfrutar está alegría por terminar los primeros cinco

-Hemos aprendido de estos libros- dijo Poseidón

-Pero al parecer no es suficiente, si no, no estarían los otros cinco allá- dijo Hestia con tranquilidad

-Supongo que no querrán seguir leyendo ¿Verdad?- preguntó Apolo

Los semidioses negaron

-No- dijo Hermes - hay ciertas cosas que necesito resolver- dijo mirando a Luke

-Entonces podemos tomarnos un descanso- dijo Artemisa

-Genial- dijo Connor -¿Saben lo que eso significa?

Los chicos lo miraron raro

-Es hora de aprender a manejar el caduceo en modo láser- gritó Travis...